Churras con merinas: ¡NO!

El refrán popular se hace evidente. "Las churras con las merinas" no se adaptan bien. Y esa adaptación tampoco se consigue en el tripartito de gobierno en nuestro querido Cáceres. El tiempo va pasando y la realidad nos dice que hay mucha falta de entendimiento o que cada uno quiere protagonismo a costa del otro, y como los tres se necesitan, se soportan aunque caiga un chaparrón.

Leyendo la prensa regional y teniendo reciente la miniserie que el martes y jueves ha pasado TVE titulada "23 F:el día más difícil del Rey", he recordado las palabras que Milans del Bosch realizó unos días antes de la intentona de golpe de estado durante unas maniobras militares en presencia del rey Juan Carlos. Ahora resulta que Tomás Pavón, según recoge el diario Extremadura ante la pregunta ¿Romperá el pacto?", que hasta cuatro veces le hizo el EL PERIODICO, la primera vez contestó: "Yo no quiero romper el pacto". La segunda dijo: "Ya se verá estos días", a lo que añadió: "Tengo balas en la recámara, tengo medio cuartel de artillería". A la tercera apuntó: "Eso no es asunto mío". Y a la cuarta, concluyó: "Lo que vaya a pasar estos días ya se irá viendo". Pese a su imprecisión, lo que Pavón sí dejó claro es que "este flirteo --se refería a Vela-- conmigo no va". Y añadió: "Pasan dos cosas gravísimas: una que quienes gobiernan no son quienes han elegido las urnas sino una camarilla de funcionarios, y otra que el ayuntamiento está en quiebra económica".

Y he dicho que me ha recordado a Milans del Bosch por "tengo balas en la recámara, tengo medio cuartel de artillería". Ya está bien de amenazas, si de verdad está cansado rompa el pacto señor Pavón, si no se soportan no sigan, la política es fruto del entendimiento y ustedes no se entienden y Cáceres lo que necesita es acuerdo y menos perder el tiempo en disquisiciones inútiles. ¿ésta es la imagen que de cara al exterior queremos dar para conseguir la capitalidad cultural del 2016?; lo tenemos claro.

Renunciar o dimitir dignifica a quien lo hace.